Desde las estructuras más grandes hasta los electrodomésticos más pequeños, la mayor parte de los productos manufacturados tienen un revestimiento protector o embellecedor. El fallo prematuro de este revestimiento puede llegar a ser motivo de costos adicionales de reparación.
Las pruebas de adherencia después de la aplicación del revestimiento, cuantifica la resistencia de la unión entre el sustrato y el revestimiento, o entre diferentes capas de revestimiento o bien la fuerza cohesiva de algunos sustratos. Como parte de los procedimientos de inspección y mantenimiento se recurre a una serie de pruebas rutinarias para contribuir a detectar posibles fallos del revestimiento.
Cuando se selecciona un medidor de adherencia, es importante usar los mismos métodos de prueba de inspección durante toda la inspección para garantizar unas comparaciones rigurosas.